jueves, 16 de junio de 2011

Un triunfo que vale una odisea, Juan Carlos Cubas en Huancavelica

La llegada


Mil peripecias tuvieron que pasar el matador Juan Carlos Cubas y su cuadrilla para poder cumplir con su presentación en Huancavelica. Carretera bloqueada, bombas lacrimógenas y todas las rutas de acceso a la ciudad de destino prácticamente inhabilitadas. Un buen samaritano, de aquellos que aparecen cuando menos se espera y cuando más se necesita, se ofreció a trasladarlos por la ruta más larga e inapropiada, abriéndose paso a pie en algunos momentos y bordeando un sinnúmero de cerros pudieron llegar, tal era el esmero por cumplir con el compromiso pactado y las ganas inmensas del matador de poder torear en esa ciudad que lo acoge como el hijo pródigo.

La corrida.




Luego de 5 horas de un inusual viaje, el paseíllo lo hizo el matador Juan Carlos Cubas con su cuadrilla conformada por Dennis Castillo, Doni Camargo, Victoriano Castillo y David de la Barra. El toro era de la ganadería de San Pedro y el torero Huancaíno lo brindó a la memoria de su tío Germán Saco Vertiz, quien falleciera días antes del festejo. Momento sensible el del brindis con la mirada al cielo de Huancavelica.
El astado estuvo complicado en un inicio pero el entendimiento, categoría y valentía mostrada por Cubas hizo que cuajara una faena muy del agrado del público. Se metió entre los pitones el de Huancayo, demostrando que todo el esfuerzo por llegar no podía pasar desapercibido, no podía ser en vano. Una faena meritoria, valiente y decidida, estocada hasta la empuñadura y dos orejas a pedido del respetable que premió en interminable ovación la vuelta al ruedo y que Juan Carlos recibió muy emocionado.




El regreso.



La cuadrilla completa tuvo que quedarse a pernoctar en Huancavelica para enrumbar a Huancayo. Ahora el matador retomará su entrenamiento en esta ciudad con miras a su próxima presentación en Cutervo, los días 28 y 30 de Junio.